El puente de La Toja… el más largo de Europa

Es cierto, igual el titular es un poco inexacto y quizá deberíamos complementarlo con «en 1911», pero eso no hace que sea menos verdad: El puente de 400 metros que une O Grove con la Isla de La Toja era el más largo de Europa en el momento en el que se construyó.

En 1907, tras la inauguración del Gran Hotel de La Toja y el Casino, para facilitar el acceso al mismo a sus por entonces ilustres huéspedes (Los hermanos Rockefeller, Henry Kissinger, los Reyes de España, Ortega y Gasset o Gabriel García Márquez entre otros) se proyectó la construcción de un viaducto que uniese la costa de O Grove con la Isla de La Toja. Esta distancia de menos de 500 metros suponía todo un reto para los ingenieros de la época y desde luego toda una hazaña a nivel mundial dados los avances del momento.

Construcción del puente de La Toja

La planificación se llevó a cabo y el 28 de Julio de 1910 se daba por finalizada la construcción del puente, convirtiéndolo, en el más largo de Europa de sus características. Para dicha inauguración, el Hotel Balneario invitó a un grupo de periodistas ingleses a que fuesen los primeros en recorrerlo en una caravana de automóviles para así ayudar a su promoción. Recordemos que por aquella época era el posible turismo que podía permitirse y aprovecharse de los beneficios termales de las aguas de la Isla de La Toja.

Inauguracion Puente de La Toja

Y con esta curiosa historia y con el origen mismo de la leyenda del burro que descubrió las aguas termales o la del sarraceno armado con una lanza de fuego (relato que os contaremos en otra ocasión) es como La Toja pasó de ser una isla desierta cubierta de maleza (tojos o «toxos» de los que recibe su nombre) a ser uno de los centros termales más importantes de España.

Y esta es, a grandes rasgos, la historia de nuestro querido puente, el porqué se construyó, y cómo sirve de unión física de leyenda e historia, de curación y relajación, de nobleza y pueblo… de isla y tierra firme.